Desde el albor de la humanidad, a lo largo de toda su historia, uno de los mayores problemas de las sociedades humanas, es un estigma que a la fecha sigue vigente y que, aunque ha menguado, no se ha logrado erradicar en su totalidad: la discriminación.
Presente desde la estructuración de una sociedad civilizada y probablemente desde antes, este estigma se ha mantenido por motivos variados. Desde raza, posición socioeconómica, religión, nacionalidad, filiación política, orientación sexual y muchos más. Este aparato de conducta cimentado en una forma de pensar gregaria, es la discriminación llevada a la práctica y todavía en tiempo presente se mantiene arraigado de una u otra manera a la mayoría de las culturas del mundo.
Este día busca generar conciencia masiva sobre las desventajas de la discriminación en la sociedad. Se celebró por primera vez en el 2014 y además, tiene como objetivo principal promover la igualdad ante la ley y en la práctica en todos los países miembros de las Naciones Unidas.
Ante todo este tipo de campañas, se pretende crear paulatinamente, generaciones en cuyo imaginario colectivo, no existe la determinante cultural de la discriminación, como objeto de estatus o superioridad.
Cada año que pasa estamos más cerca de lograr la meta, y cada paso que se da, por más insignificante que parezca, tiene un alto impacto en la consecución de esta meta. Recuerda que la mejor forma de aportar a esta causa, es llevándolo a la práctica en nuestra vida diaria, y compartiéndolo como filosofía de vida a nuestro alrededor.
