Iniciar el año con el pie derecho siempre es una buena decisión y elaborar el presupuesto familiar con antelación es aún mejor.
La vida es incierta y aunque intentemos planificar cada aspecto de ella, siempre hay factores que se escapan de nuestro control. Es ahí donde las pólizas de vida y salud toman un papel protagónico.
Incluirlas en tu estrategia financiera es clave para protegerte y resguardar a tu familia ante cualquier eventualidad. En esta entrega del blog exploraremos cómo este tipo de pólizas te brindan la tranquilidad que necesitas para proteger tu bien más preciado, la familia.
Cobertura ante imprevistos de salud
Los accidentes, las enfermedades o cualquier situación imprevista que afecte tu salud llegan a tu hogar de la nada y tienen un efecto devastador en tu estabilidad económica y emocional.
Las pólizas de salud actúan como una red de seguridad que te ofrece protección y capacidad para cubrir gastos en el momento que más lo necesitas. Además, garantiza acceso a atención médica de calidad sin tener que preocuparte por los costos.
Imagina un escenario en el que tú o alguien de tu entorno recibe un diagnóstico inesperado o tiene un accidente. Las facturas médicas, los tratamientos prolongados y la pérdida de ingresos debido a los gastos que eso generaría podrían ser abrumadores.
Y es lo que precisamente le sucedió al cónyuge de uno de nuestros asegurados, que recibió un diagnóstico de mieloma múltiple, tuvo que recibir un trasplante y el monto de todo el tratamiento sobrepasó el millón y medio de dólares.
Ese valor intangible de una póliza que muchas veces no dimensionamos te permite concentrarte en lo que realmente importa cuando tú o alguien cercano tiene una enfermedad, la recuperación.
Protección a tu familia en todo momento
Incluir un seguro de vida en tu presupuesto te permite proteger a tu familia y estar preparado para enfrentar cualquier tipo de contratiempo .
Una póliza de vida proporciona a tus seres queridos una cobertura económica en caso de ausencia, evitando que enfrenten dificultades financieras al mismo tiempo que atraviesan el dolor de una pérdida.
Las pólizas de vida de BMI, como Best Indexed encajan perfectamente en la ecuación de proteger a tu familia porque tienen muchas ventajas, entre ellas la acumulación de valor basado en el desempeño bursátil. Vida Indexada – BMI Internacional
Además tienen anexos disponibles como: renta familiar, seguro de vida temporal, exoneración de cargos mensuales por incapacidad y beneficios acelerados por enfermedades terminales.
Un ejemplo aterrizado de las ventajas de este tipo de póliza a largo plazo es el siguiente: supongamos que José Pérez (nombre ficticio) tiene 40 años es no fumador y quiere obtener una póliza de seguro de vida indexada por medio millón de dólares, además quiere pagar primas hasta los 65 años y recibir una renta mensual de 3,000 dólares de los 70 a los 90 años. ¿Cómo podría esto ser posible?
La respuesta en sencilla, él debería pagar una prima anual de 6, 850 dólares por los 25 años que desea y el resultado es que podría recibir en vida 720 mil dólares (36,000 dólares anuales de la renta recibida por 20 años), pero lo más interesante es que solo deberá pagar a BMI 171, 375 dólares que equivalen a la prima target.
Este ejemplo refleja el valor imperceptible de un seguro de vida en tu presupuesto anual. A futuro podrías vivir tranquilo y afrontar situaciones complejas con calma, pero sobre todo, sin tener que recurrir a préstamos o endeudamientos para cubrir un imprevisto.
El tiempo pasa, planifica y actúa hoy
El inicio de un nuevo año es el momento perfecto para tomar decisiones financieras inteligentes y estratégicas. Al incluir un seguro de vida o salud en tu presupuesto del próximo año, estarás dando un paso hacia un futuro más seguro, protegido y tranquilo.
No veas la adquisición de una póliza como un gasto adicional, piensa que es una inversión en tu bienestar y el de tu familia.
La vida puede ser impredecible, pero con la póliza adecuada, tendrás la certeza que no importa lo que pase, porque estarás preparado para enfrentarlo con resiliencia y tranquilidad.
Y más allá de la protección ante lo inesperado, incluir un seguro de vida o salud en tu presupuesto anual, se convierte en una herramienta preventiva que te ahorrará muchos dolores de cabeza y te dará tranquilidad, algo que no tiene precio.
