La productividad laboral depende de muchos factores, siendo la concentración un aspecto fundamental.
¿Cuántas veces te has quedado sin terminar lo que empiezas, y no sabes qué salió mal?
Muchos de los errores o atrasos que suceden comúnmente en horas de trabajo se deben a la falta de concentración y no necesariamente a las habilidades profesionales. Nuestra capacidad para concentrarnos se ve deteriorada por dos aspectos principales: las distracciones externas y los malestares físicos. En el primer caso las soluciones pueden ser bastante sencillas, pero en el segundo, las cosas se complican, ya que es necesario un cambio de hábitos.
El cerebro, como cualquier otro órgano, se fatiga y necesita períodos de descanso para recuperar su buen funcionamiento. Por eso, debemos diseñar un plan que nos ayude a mantener nuestra mente relajada para enfrentar cualquier tarea.
Sigue estos simples consejos y verás como tu vida laboral mejorará sustancialmente:
1. Dormir bien. Una persona debe dormir al menos 7 horas al día para mantener en óptimas condiciones sus capacidades mentales. Mantener estables tus ciclos de sueño disminuirán los niveles de ansiedad y estrés durante el día.
2. Planifica tus actividades. Destina un horario específico a cada una de tus tareas, ajustar tus tiempos te ayudará a alcanzar objetivos sin distracciones. La planificación requiere disciplina, ¡el pilar de la concentración! Recuerda que ser más organizado te ayudará a focalizar tus esfuerzos.
3. Apaga el móvil. Sabemos que en este mundo hiperconectado el celular se ha vuelto imprescindible, pero hay que ser honestos, existen momentos en que podemos silenciar las alertas. Hacer esto durante momentos determinados te permitirá trabajar más rápido.
4. Escribe con papel y pluma. Escribir a mano obliga a nuestro cerebro a realizar un esfuerzo superior para concentrarse. Además, cuando redactamos de esta manera también estamos apoyando a nuestra memoria a largo plazo.
5. Meditar. La práctica de la meditación definitivamente mejora la capacidad de concentración. Ten en cuenta que el principio básico de esta práctica de relajación es enfocarse en algo específico, lo que la convierte en un excelente ejercicio para nuestra mente. Y lo mejor es que no tienes que salir de la oficina para hacerlo