La sensación de felicidad que te genera preparar y realizar un viaje no tiene precio. Y esto se debe a que los viajes tienen un impacto significativo en la producción de serotonina, la “hormona de la felicidad”.
Viajar no solo es una oportunidad de descubrir nuevos destinos, culturas y gastronomía. Es el momento ideal para agregarle energía positiva a tu cuerpo y, por ende, a tu salud.
En esta edición del blog, queremos explorar por qué los viajes son una fuente de bienestar emocional y cómo debes aprovechar este fenómeno para tu beneficio.
Viajes y serotonina: vínculo directo
La serotonina es un neurotransmisor clave en el cerebro que regula el estado de ánimo, el sueño, el apetito y el bienestar general. La Organización Mundial de la Salud, recomienda el cuidado personal y fomento del bienestar general como una forma de combatir la depresión y la ansiedad, Autocuidado para la salud y el bienestar es ahí donde los viajes pueden convertirse en una excelente alternativa.
Experiencias enriquecedoras como los viajes, pueden estimular la producción de serotonina, lo que generaría una sensación de felicidad y bienestar general que ayudaría a mejorar tu estado de ánimo.
- Experiencias nuevas y la liberación de serotonina: cuando viajamos, nos exponemos a situaciones nuevas y estimulantes que generan emociones positivas.
Estas experiencias activan áreas en el cerebro relacionadas con la recompensa, como el sistema dopaminérgico y el sistema límbico, lo que incrementa los niveles de serotonina.
- El poder de la naturaleza: el aire libre y la exposición al sol durante los viajes también contribuyen a aumentar los niveles de serotonina, ya que la luz solar estimula la producción de esta hormona en el cerebro. 7 beneficios de tener contacto con la naturaleza – BMI Companies
Los viajes ayudan a combatir el estrés y la ansiedad
En la actualidad el estrés y la ansiedad son problemas comunes, pero los viajes pueden ofrecer una vía de escape y alivio.
Si desconectamos de nuestras obligaciones diarias y nos sumergimos en nuevas experiencias, el cerebro experimenta una reducción en la liberación de cortisol (la hormona del estrés), lo que favorece una sensación de calma.
Cambio de escenario: estar en un entorno diferente, lejos de las preocupaciones cotidianas, permite que el cerebro se relaje y eso facilita la liberación de endorfinas, que ayudan a crear una sensación general de bienestar.
Algunos hoteles incluyen estancias con alimentación saludable, sesiones de entrenamiento personal, yoga y meditación.
Reducción del estrés y la ansiedad: viajar a destinos tranquilos, como la playa o áreas rurales, también ayuda a disminuir la ansiedad, porque se refuerza la conexión entre la naturaleza y elementos que generan tranquilidad y paz a tu cuerpo.

Beneficios físicos adicionales
Si bien los efectos psicológicos de viajar son muy bien conocidos, los beneficios físicos no deben subestimarse. Viajar puede ser una forma activa de mejorar tu salud, especialmente si optas por destinos que fomentan la actividad física.
- Aventura y actividad física: viajar a ciertos destinos que te animen a caminar, hacer senderismo, nadar o practicar deportes puede aumentar tus niveles de actividad física.
El ejercicio regular está estrechamente relacionado con un aumento en los niveles de serotonina, lo que mejora tanto tu salud física como mental.
- Mejora del sueño y la energía: la desconexión de las pantallas y las preocupaciones, junto con la mejora de la exposición a la luz natural, favorece un ritmo circadiano saludable, lo que puede resultar en un sueño más reparador.
Un buen descanso es crucial para mantener niveles saludables de serotonina y mejorar tu rendimiento diario.
Los viajes como terapia de autocuidado
El concepto de “autocuidado” ha cobrado relevancia en los últimos años, por tanto, los viajes pueden ser una excelente forma de invertir en tu bienestar. No se trata solo de descansar, sino de vivir experiencias que te recarguen emocionalmente.
- Desconectar para reconectar: el simple hecho de alejarse de las demandas cotidianas y sumergirse en nuevos ambientes puede ayudarte a reconectar con tus emociones y necesidades personales.
Esta introspección y tiempo de calidad te permiten disminuir el estrés y mejorar tu salud emocional.
- Redefinir prioridades y fomentar el bienestar: viajar también ofrece la oportunidad de replantear tus metas y prioridades.
Buscar tiempo para la reflexión, lejos de la rutina, puede mejorar tu visión de la vida, aumentar tu autoestima y promover un equilibrio entre la mente y el cuerpo.

Cómo elegir destinos que favorezcan tu salud mental y física
Algunos destinos están especialmente diseñados para fomentar estos efectos, por ello, te brindamos algunas recomendaciones de turismo de bienestar que deberías agregar a tu bucket list.

Destinos con naturaleza exuberante: el contacto con la naturaleza, ya sea en la montaña, la playa o bosques, es una excelente manera de reducir el estrés y aumentar tus niveles de serotonina.
- Escapadas en solitario: viajar solo puede ofrecer un espacio para la reflexión y la desconexión, permitiéndote sumergirte completamente en tu bienestar.
- Retiro de bienestar: muchos destinos ofrecen retiros de yoga, meditación o mindfulness, donde puedes realizar prácticas que equilibren tanto tu cuerpo y mente.
Es mejor prevenir que lamentar
Un elemento importante a la hora de organizar un viaje cuyo propósito es desconectar, es la precaución. Esto significa que debes incluir un plan de asistencia en viaje que te permita estar protegido ante cualquier eventualidad. www.bmitravelassist.com
Viajar asegurado es un elemento muy importante, si lo que estás buscando es que el viaje genere serotonina a tu cuerpo, evita situaciones de estrés que puedan estropear ese plan.
Trata de buscar un seguro que te permita seleccionar entre planes diarios, de larga estadía u opciones que incluyan a toda la familia para garantizar su protección y enfocarte solo en disfrutar el viaje.
Recuerda, los viajes no solo son una forma de entretenimiento o recreación, sino una poderosa herramienta para mejorar tu salud mental y física.
Al exponerte a nuevas culturas, experiencias, personas y entornos relajantes puedes aumentar tus niveles de serotonina, reducir el estrés y promover una sensación general de bienestar.
Así que, la próxima vez que planifiques una escapada, recuerda que no solo estás buscando diversión, sino también invirtiendo en tu salud integral.