Los padres suelen priorizar el bienestar de su familia antes que el propio. En medio de sus responsabilidades, muchas veces dejan de lado su salud. Pero cuidarse no es un lujo, es una forma de estar realmente presente para quienes más amas. Realizar chequeos médicos de forma oportuna puede prevenir enfermedades silenciosas o detectar condiciones en etapas tempranas, cuando el tratamiento es más efectivo.
A continuación, presentamos los cinco controles médicos fundamentales que papá no debería postergar.
Control de presión arterial
La hipertensión es conocida como el “asesino silencioso”, porque muchas veces no presenta síntomas evidentes. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), afecta a más de 1.280 millones de adultos entre 30 y 79 años, y dos tercios de ellos viven en países donde los niveles de vida son menores.
Lo más alarmante es que el 46 % de los adultos hipertensos no sabe que tiene esta afección, y menos de la mitad recibe diagnóstico o tratamiento adecuado. Solo uno de cada cinco personas con hipertensión la tiene bajo control.
Perfil lipídico (colesterol y triglicéridos)
El exceso de ‘colesterol malo’ (LDL) y triglicéridos en la sangre está directamente asociado a enfermedades del corazón, de acuerdo con Medline Plus. Un examen de sangre permite conocer estos niveles y tomar decisiones sobre el estilo de vida o iniciar un tratamiento.
American Heart Association recomienda realizar estos exámenes cada cuatro a seis años en adultos sanos. Sin embargo, Medline Plus detalla pautas más específicas según la edad: en niños, la primera prueba debe realizarse entre los nueve y los 11 años, y repetirse cada cinco años.
Algunos menores podrían necesitarla desde los dos años si existen antecedentes familiares de colesterol alto, infartos o accidentes cerebrovasculares. En adultos jóvenes (entre 20 y 45 años), se recomienda hacerla cada cinco años. Para hombres entre 45 y 65 años y mujeres entre 55 y 65, la prueba debe repetirse cada uno o dos años, y a partir de los 65 años, lo ideal es realizarla anualmente.
Examen de próstata
American Cancer Society especifica que los hombres deben empezar a realizarse pruebas de detección de cáncer de próstata en diferentes edades según su nivel de riesgo.
Es ideal hacerse pruebas si estás en el siguiente rango de edad: si tienes 50 años y un riesgo promedio, a los 45 años si presentas un riesgo alto, como en el caso de hombres de raza negra o aquellos con un padre o hermano que haya sido diagnosticado antes de los 65 años; y a los 40 años si tienes un riesgo muy alto, con más de un familiar directo que ha tenido cáncer de próstata a edad temprana.
Dependiendo de los antecedentes familiares, es clave realizar el examen del antígeno prostático específico (PSA) y, en algunos casos, el tacto rectal. El National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases indica que estas pruebas permiten detectar alteraciones en la próstata, como hiperplasia o incluso cáncer en etapas tempranas.
Control de glucosa en sangre
Medir la glucosa en ayunas o realizar una prueba de hemoglobina glicosilada permite detectar niveles alterados antes de que aparezcan complicaciones. La detección temprana da margen para modificar hábitos y evitar el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 1 o tipo 2. De acuerdo con Mayo Clinic, para medir los niveles de glucosa en sangre, se realiza un análisis tras un período de ayuno de al menos ocho horas o durante toda la noche. Un valor inferior a 100 mg/dL (5,6 mmol/L) se considera normal. Si el resultado está entre 100 y 125 mg/dL (5,6 a 6,9 mmol/L), se clasifica como prediabetes. Un nivel igual o superior a 126 mg/dL (7,0 mmol/L) en dos pruebas distintas indica un diagnóstico de diabetes.
Revisión de salud mental
Aunque no siempre se hable de ello, el bienestar emocional también debe ser evaluado. El estrés prolongado, la ansiedad o la depresión pueden afectar el estado físico y mental. Asimismo, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que los trastornos de salud mental pueden incrementar el riesgo de desarrollar otras enfermedades.
¿Por qué estos chequeos son importantes?
Los chequeos médicos no solo sirven para tratar enfermedades. Su verdadero valor está en prevenir, anticiparse y vivir con mayor tranquilidad. Cuando papá se cuida, cuida también a su familia. Incluir estos controles en su rutina anual es una forma de invertir en salud y bienestar integral.
Realizar estos cinco chequeos médicos de forma periódica permite detectar a tiempo condiciones que, de no tratarse, pueden afectar gravemente la salud y la calidad de vida. Incluirlos en la rutina de cuidado anual no solo ayuda a prevenir enfermedades, sino que también mejora la capacidad de respuesta ante cualquier diagnóstico. En definitiva, mantenerse al día con estos controles es una decisión inteligente para preservar el bienestar, la funcionalidad y la longevidad.
